Nos propone hacer tres autoretratos, uno con la mano que habitualmente escribimos, otro con la otra, y otro con los ojos cerrados.
Mi primera idea es.. "oh no! empezamos bien, que no se dibujar y mucho menos un autorretrato"
Una chica de clase se atreve a verbalizar que no sabe dibujar, lo que ocasiona una reacción de los profesores de terapia de choque.
Ya que cada uno es capaz de hacer lo que se proponga, así que nos hacen verbalizar y escribir
"YO DIBUJO MUY BIEN"
En cada autorretrato hemos de poner la frase, "yo dibujo muy bien" con la mano que toque y de la manera que toque.
Primer dibujo :Mano Derecha
Segundo Dibujo: Mano Izquierda
Tercer Dibujo: Ojos Cerrados
SENSACIONES:
Con la mano derecha los trazos son mas seguros, mucho más precisos, lo que permite trabajar a un tamaño más pequeño.
Al trabajar con la mano izquierda y al ser diestra, necesite hacer trazos mucho más grandes, para tener más seguridad en los trazos, aún así observamos líneas de arrepentimiento en el ovalo de la cara, al utilizar la izquierda también utilice diferentes estrategias como ladear el lápiz para hacer el pelo como si fueran sombras, ya que era mucho más sencillo que intentar realizar trazos más precisos de diferentes tamaños.
Con la mano derecha el folio se quedo en una sola posición, para poder dibujar con la izquierda he tenido que ir girando el folio, aparte de empezar el dibujo con el folio apaisado.
Y a mi gusto el que he realizado con la mano izquierda creo que es el que ha quedado mejor.
El dibujo realizado con los ojos cerrados, y la mano derecha, me transmitió más inseguridad. Parece un Picasso, (siempre desde el respeto al gran artista) también me recuerda aun grafismo más naïf, a más de niños pequeños. Da la sensación de tener mucho movimiento.
Ha sido una experiencia positiva que ya empieza a darnos ideas de como trabajar con los niños.
Al trabajar con la mano izquierda y al ser diestra, necesite hacer trazos mucho más grandes, para tener más seguridad en los trazos, aún así observamos líneas de arrepentimiento en el ovalo de la cara, al utilizar la izquierda también utilice diferentes estrategias como ladear el lápiz para hacer el pelo como si fueran sombras, ya que era mucho más sencillo que intentar realizar trazos más precisos de diferentes tamaños.
Con la mano derecha el folio se quedo en una sola posición, para poder dibujar con la izquierda he tenido que ir girando el folio, aparte de empezar el dibujo con el folio apaisado.
Y a mi gusto el que he realizado con la mano izquierda creo que es el que ha quedado mejor.
El dibujo realizado con los ojos cerrados, y la mano derecha, me transmitió más inseguridad. Parece un Picasso, (siempre desde el respeto al gran artista) también me recuerda aun grafismo más naïf, a más de niños pequeños. Da la sensación de tener mucho movimiento.
Ha sido una experiencia positiva que ya empieza a darnos ideas de como trabajar con los niños.
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